Volgueren enterrar-nos, no sabien que érem llavor
(¡Quisieron enterrarnos, no sabían que éramos semilla!)
Después de que las anteriores obras sobre milicianas y milicianos de la Guerra Civil se llevaran a cabo fuera de Barcelona o en la ciudad condal, pero en muros de carácter efímero, el artista Roc Blackblock decidió aprovechar la invitación a pintar en el festival de calle Artescape para recuperar las plantillas del mural hecho para la Marxa d’homenatge als Maquis (Marcha de homenaje a los Maquis). El marcado carácter reivindicativo y social de Can Batlló se convertía en el contexto ideal para llevar a cabo una obra de estas características.
Como si hubiera sido planificado así, el muro donde se realizó el mural tiene un pequeño parterre justo debajo donde crecen unas hiedras que trepan por mural, dando una nueva dimensión poética a la frase que lo preside. Una referencia directa a los miles de muertos que aún hoy siguen enterrados en fosas comunes sin ningún respeto ni dignidad. Desde que se pintó la hiedra ha podado varias veces y cada vez, como no podía ser de otro modo, ha vuelto a crecer y abrazar los milicianos.